26/1/10

Cientificos cubanos en lucha permanente por defender la vida



Uno de los sectores que marcha a la vanguardia en nuestro país es el sector de las ciencias.
Instituciones como el Finlay, el Centro de Ingeniaría Genética, la Universidad de la Habana, el Instituto Pedro Kourí y el propio Centro Nacional de Investigaciones Científicas (CNIC) por sólo citar algunos  son ejemplos más que elocuentes de la consagración de hombres y mujeres que ponen intelecto y voluntad en una batalla por la vida.
Por eso, sería injusto no hablar de los aportes suyos en las últimas décadas cuan do se han crecido para burlar el bloqueo impuesto por los Estados Unidos cuyos gobiernos históricamente han hecho lo posible para que la población cubana no reciba aquellos medicamentos de última generación.
El cáncer hepático es, por ejemplo, la neoplasia más difundida en aquellas regiones donde el virus de la hepatitis B tiene alta prevalencia y en el mundo existe una cantidad considerable de portadores asintomáticos, lo que hace cada vez más complejo el control de la infección.
Con el advenimiento de esta vacuna creada por los científicos cubanos y su inclusión en el programa ampliado de vacunación la situación ha comenzado a cambiar: se reducen loscasos nuevos y los portadores y como consecuencia se disminuye la mortalidad por cáncer hepático como secuela de este virus.
Otro logro de nuestros científicos es la vacuna contra la haemofilus influenzae que este año ha preservado la vida a miles de niños y ancianos fundamentalmente.
Nuestros hijos están inmunizados contra 13 enfermedades letales: tétanos, sarampión, poliomielitis y difteria son algunas de ellas, todo obra de los científicos cubanos que usando los más variados métodos y tecnologías no cesan en su afán por preservar la vida.

María de los Angeles Polo Vega



Parlamentarias cubanas colocan a Cuba en la septima posición mundial.


   “Que tiemblen los enemigos de los pueblos donde cada mujer es un soldado de la patria”
Con esta sentencia de Vilma espín Guillois quiero iniciar este comentario en el que me detendré en algunos aspectos históricos y culturales que han impedido que las mujeres ocupemos realmente el espacio que por derecho y con esfuerzos hemos ganado.
El propio Comandante en Jefe Fidel Castro en uno de sus discursos alertaba.”La realidad es que aún subsisten factores objetivos y subjetivos que mantienen una situación de discriminación  en relación con la mujer”.
Indiscutiblemente la Revolución Cubana ha ganado paulatinamente terreno a los prejuicios, a los estereotipos, pero aún existen vestigios de discriminación que ocasionan que mujeres con todas las condiciones no ocupen determinadas responsabilidades.
Una de ellas, por ejemplo, es sólo el 36 por ciento de presencia femenina que ostenta Cuba en el parlamento nacional.
Las cubanas después de enconadas batallas lideradas por movimientos feministas de la época, obtuvimos el derecho al sufragio activo y pasivo sin restricciones el día 3 de febrero de 1934.Valga reconocer el papel que en ese contexto tuvo Antonio Guiteras Holmes que en aquel momento fungía como Secretario de Gobernación del Gobierno de los 100 días y que fue, el primero que designó en la República a dos mujeres para el cargo de alcaldesas.
Desde entonces mucho hemos avanzado, la Federación de Mujeres Cubanas ha desarrollado durante estos 50 años una estrategia de promoción femenina en todos los niveles e instancias de forma permanente y persuasiva.
Estrategia que se integra a los esfuerzos del estado socialista en función de la promoción de la mujer, lo que unido a la alta preparación cultural, técnica y científica alcanzadas por nosotras y nuestra creciente participación en todos los ámbitos de la vida nacional han sido premisas decisivas en el incremento de mujeres a los órganos del Poder Popular desde la base hasta el Parlamento.
Sin embargo, el avance es bastante discreto, aún cuando la Unión Parlamentaria coloca a Cuba en el séptimo puesto en el mundo conjuntamente con España, pues todos sabemos que ese 36 por ciento es insuficiente, que aún pesan en muchas conciencias los viejos conceptos de que las tareas compartidas por la pareja y por la familia corresponden sólo a la mujer.
Me refiero a las responsabilidades del hogar, el cuidado de los niños y los ancianos, por eso muchos dudan de que las mujeres dispongamos del tiempo para dirigir y teman sobrecargarnos.
Sin embargo, las actuales delegadas del Poder Popular en Cuba han demostrado una infinita capacidad y como dijera Fidel al clausurar el histórico Segundo Congreso de la Federación de Mujeres Cubanas en marzo de 1974 “ (…) tiene que llegar el día en que tengamos un Partido de hombres y mujeres y una dirección de hombres y mujeres y un gobierno de hombres y mujeres. Y creo que todos los compañeros están conscientes de esa es una necesidad de la Revolución de la Sociedad y de la Historia”.
 María de los Angeles Polo Vega